Los datos de desempleo del mes de abril reflejan una evolución positiva en la provincia de Salamanca, en buena medida influida por la campaña de Semana Santa, que ha tenido un impacto directo en el sector servicios. Sin embargo, desde CEOE CEPYME Salamanca se considera prioritario seguir defendiendo un entorno económico estable, que no suponga nuevos costes ni obstáculos para las empresas, con el fin de proteger el tejido productivo y fomentar la creación de empleo.

Según las cifras del Ministerio de Trabajo y Economía Social, el número de personas en situación de desempleo en Salamanca se sitúa en 16.964, lo que supone una reducción de 731 respecto al mes anterior, un 4,4% menos. En comparación con abril de 2024, la provincia registra 696 parados menos, un descenso interanual del 3,9%, lo que confirma una progresiva reincorporación de personas al mercado laboral. El sector servicios ha liderado esta bajada del paro, con 550 personas menos, consolidándose como el principal motor de generación de empleo en la provincia.

A pesar de estos datos positivos, CEOE CEPYME Salamanca reitera su preocupación por el actual contexto de incertidumbre normativa, que se agrava con nuevas medidas que alteran el marco de relaciones laborales y debilitan la seguridad jurídica de las empresas. En particular, el aumento de cargas administrativas, los cambios legislativos sin consenso y la aprobación de reformas que afectan directamente al ámbito de la negociación colectiva o a la jornada laboral generan un entorno cada vez más complejo para las pequeñas y medianas empresas.

En este sentido, los constantes cambios regulatorios, el exceso de cargas burocráticas y el imparable incremento de costes impuestos por el Gobierno de España, todo ello sin consensuar o contraviniendo el diálogo social nacional (como los cambios en la prevalencia de los convenios colectivos saltándose lo consensuado en la reforma laboral o la reducción de la jornada laboral, cuyo proyecto de Ley aprobará el Consejo de Ministros previsiblemente el día de hoy), afectan al empleo en las pequeñas empresas y destruyen tejido empresarial.

Desde CEOE CEPYME Salamanca insistimos en la necesidad de seguir trabajando en la adopción de medidas que, estimulando la actividad económica, supongan un apoyo real a las empresas que se traduzca en una intensa y progresiva creación de empleo.